Buenos lunes chic@s!!! De nuevo arranca una semanita más 😉. Espero que hayáis disfrutado muchísimo de estos días de solete que hemos tenido.
Aquí en Madrid hemos tenido fiesta y yo me escape de puente a mi rincón secreto de retiro, algún día con mucho gusto os mostrare cual es, para que sepáis donde me escondo del mundanal ruido.
Bueno vamos al lío, que además la entrada de hoy me viene que ni pintada, ahora sabréis porque.
Seguro, segurísimo que muchas de vosotras hay mañanas o días en los que no sólo no sabes que ponerte sino que además no te sientes a gusto con nada de lo que te pruebas. Yo soy de dejarlo todo para última hora y visitar mi armario media hora antes de salir de casa, no suelo planificar mis looks porque me visto muchas veces en función de como me siento.
Mentiría como una vellaca si dijera que me veo y me siento estupenda todos los días, Dios me libre porque mi ego no entraría por la puerta. No eso no es así, pero ni para mi, ni para ninguna mujer, ni si quiera Gisele Bunchen, te lo aseguro.
Hay multitud de motivos por los que a veces no nos apetece complicarnos la vida vistiendo y sabes… NO tenemos porque hacerlo. Muchas veces en la simplicidad, en lo obvio y en lo que te pide el cuerpo está la clave de un look natural y con estilo.
MENOS es MÁS, es una máxima que suele dar buen resultado.
El POST de hoy versa sobre como vestir con estilo esos días en los que no sabes ni que esa palabra existe. Días en los que te encuentras más hinchada que nunca, en los que tu humor solo da para jugar a combinar nada más que la clave de la alarma, o simplemente días en los que se te han pegado las sábanas y no tienes más que tres minutos para decidir lo que te pones.
Para salir airosa en esos días y conseguir un look natural, simple, pero con estilo, no debe faltar jamás en tu armario un vestido sencillo de corte recto. Sin estridencias ni complicaciones en su diseño, sin colores o estampados llamativos, tan sólo eso un VESTIDO, que te permita ir cómoda y sentirte bien contigo misma.
Veréis, elegir un vestido de estas características para esos días en los que tienes que salir del paso tiene una serie de ventajas indiscutibles:
– al ser una sola pieza te evitas tener que pensar con que prenda de arriba o abajo lo combinas
– el corte recto evita que se ajusté a zonas que en ese momento quieres que pasen desapercibidas
– los colores neutros te permitirán usar cualquier tipo de complemento y además te aportarán serenidad y armonía.
A continuacion os propongo unos looks relajados con los que estaréis listas y estupendas en menos de lo que se hace tu café.
Vestido: ZARA, Sandalia: SEE BY CLHOE , Bolso: DIANE VON FURSTENBERG, Gafas de sol: RAY BAN
Vestido: ZARA, Sandalia: KATE SPADE Bolso: MARC BY MARC JACOBS, Gafas: REVOLVE CLOTHING
Vestido: TOPSHOP, Bolso: MADEWELL, Sandalia: ZARA, Gafas de sol: RAY BAN
Para completar estos looks con éxito, un maquillaje súper natural y un peinado de lo más desenfadado, este tipo de vestidos son tan sencillos que podrás, si quieres, arriesgar con tu complemento para darle un toque personal de estilo. Aunque de lo que se trata es de crear un outfit lo más sencillo y natural posible.
Así que ya sabes, si como a mi hoy, se te ponen los pelos como escarpias solo de pensar abrocharte un pantalón o enfundarte una faldita. Busca tu vestidito comodín y disfruta del resto de tu día tan mona y sin complicaciones. Hasta mañana guapísimas!!